Individualidades, común y utopía. Crítica libertaria del populismo de izquierda
Philippe Corcuff, Dado Ediciones, junio 2020
Reinventar una izquierda emancipadora del siglo XXI exige reinventar una brújula que incluya a la vez referencias críticas de ayer y pensadores enfrentados a los desafíos de hoy. Tal es la tarea que el sociólogo y filósofo francés Philippe Corcuff intenta en este libro, para lo cual se inspira tanto en la lectura herética de Marx como en la sociología crítica de Pierre Bourdieu, o las filosofías de Michel Foucault y de Emmanuel Levinas. Fruto de esta conexión, es su intento de reivindicar el lugar de la individualidad en una teoría política libertaria, en estrecha relación con el común. Lo cual tiene consecuencias para el análisis del capitalismo actual, haciendo de la contradicción capital/individualidad una de sus principales zonas de fragilidad. También supone comprender con Foucault las relaciones entre las limitaciones sociales estructurales y las posibilidades de subjetivación individual. El horizonte utópico de la política emancipadora se redefine gracias al pragmatismo filosófico de John Dewey y a la fenomenología de la apertura del ser de Levinas. Todo ello lleva a Philippe Corcuff a criticar algunas falsas soluciones de moda, especialmente los usos del concepto de hegemonía de Antonio Gramsci y el populismo de izquierda de Ernesto Laclau y Chantal Mouffe. Asimismo, le permite contraponer una lectura anarquista de la serie Juego de Tronos a la lectura conformista de Pablo Iglesias.
El libro esboza, a lo largo de diversos capítulos compuestos de escritos e intervenciones públicas, una ética de la fragilidad que rechace los sueños de absoluto y de pureza, dándole el nombre paradójico de socialdemocracia libertaria a ciertas pistas que van en esa dirección. Para tal fin, presentándose como intelectual y militante intelectual, Philippe Corcuff identifica, en el espacio político emergente de las experiencias socialistas y comunistas del siglo XX, dos grandes vías que trata de ampliar teóricamente. Por una parte, la necesidad de renovar y ampliar las herramientas marxianas y «marxistas» de análisis crítico del mundo con los recursos sociológicos «posmarxistas», y en particular con la crítica de las dominaciones desarrolladas por Pierre Bourdieu, la sociología pragmática iniciada por Luc Boltanski y Laurent Thévenot, o las sociologías críticas y comprensivas del individualismo. Por otra parte, una filosofía política emancipadora enfrentada a antinomias permanentes, tales como las que existen entre la consolidación de un espacio común de justicia y el desarrollo de las singularidades individuales, o entre las protecciones institucionales y la crítica libertaria de las opresiones institucionales.